Los especialistas indican que en promedio una persona come y bebe entre 200 y 500 calorías adicionales a lo recomendado, muchos provienen de snacks, bebidas gaseosas y otros alimentos que no tienen beneficios nutricionales. Aunque se pueda pensar que estos alimentos no influyen en el peso, si lo hacen. Si bien no se trata de dejar de comer entre comidas cuando se tiene hambre, se deben elegir adecuadamente los alimentos y el tipo de calorías que se ingieren.

Una de las formas más sencillas de reducir la ingesta de calorías para perder y mantener el peso es limitar la cantidad de calorías «vacías». Generalmente se obtienen de grasas trans y carbohidratos refinados, como los presentes en dulces azucarados, galletas, frituras, entre otros alimentos procesados. No siempre se trata solo del tamaño de porción, los nutrientes y calorías que tienen los alimentos pueden ser muy altos incluso en pequeñas porciones.

Lo recomendado por los especialistas es reemplazar estas dos categorías de alimentos con otros que sean ricos en nutrientes, como verduras, frutas, cereales integrales, legumbres, carnes magras, lácteos bajos en grasa, entre otros. Comer de esta manera no solo proporciona los carbohidratos saludables, las proteínas, las grasas, las vitaminas y otros nutrientes que su cuerpo necesita para funcionar y prosperar, sino que también lo ayuda a sentirse satisfecho por más tiempo.

En las últimas dos décadas, las porciones de azúcar en alimentos y el consumo por persona han aumentado significativamente. Esto ha contribuido a que México tenga una de las poblaciones con mayor sobrepeso y obesidad en el mundo. Los productos procesados con azúcar no faltan en las tiendas y supermercados y pueden tener cientos de calorías que los harán subir de peso.

Lo recomendable es eliminar el azúcar de la dieta, ya que tiene pocos nutrientes saludables que aportan a una alimentación balanceada. Se puede sustituir por endulzantes naturales en porciones pequeñas y controladas, como la miel. Recuerden que en exceso todo es malo y el azúcar no solo puede hacer que aumenten de peso, también se relaciona con otras enfermedades, como la diabetes.

La mejor forma de perder peso es utilizar más calorías de las que se ingieren. De esta manera el cuerpo comienza a tomar energía de otras partes, como la grasa acumulada. Sin embargo, es posible que no sepan realmente cuánto ejercicio deben realizar todos los días. Esto depende de varios factores, como el índice de masa, morfología del cuerpo y estado de salud. Después de la cirugía de manga gástrica Monterrey deberán llevar una rutina de ejercicio leve y posteriormente podrán aumentar la intensidad.

Lo aconsejable por especialistas es que, para perder una pequeña cantidad de peso de manera constante, se requiere de 150 a 250 minutos por semana de ejercicio a una intensidad moderada. Si desea perder una cantidad moderada de peso, la cantidad de ejercicio debe ser superior a 250 minutos a la semana, por ejemplo, una media de 45 min seis días a la semana, acompañado de un día de descanso.

El ejercicio de intensidad moderada incluye actividades variadas, como caminar a paso ligero, caminatas, aeróbicos acuáticos e incluso entrenar un juego deportivo. Puede acortar la cantidad de tiempo que tiene para hacer ejercicio realizando una actividad física más vigorosa.

Si bien el ejercicio es importante para perder peso, si solamente hacen ejercicio cierto tiempo al día y el resto de las horas se la pasan sentados o inactivos, no tendrán los resultados deseados. Es importante adoptar un estilo de vida menos sedentario, simplemente moverse más de otras maneras a lo largo del día, también puede ayudarlo a controlar su tamaño.

Recuerden que deben levantarse del escritorio durante al menos unos minutos cada hora, caminan o andan en bicicleta en más lugares en lugar de conducir y piensen en las tareas del hogar como una forma de estar más activo. Después de la cirugía bariátrica Monterrey, se recomienda realizar pequeñas caminatas y mantenerse en movimiento, esto ayudará al proceso de recuperación.

El cansancio influye en el peso de las personas más de lo que se piensa. En promedio, las personas adultas deben dormir entre siete y nueve horas para que el cansancio no influya en el peso. Estudios en personas que duermen poco han demostrado que las personas que duermen menos de cinco horas pueden tener 15% más de probabilidad de tener sobrepeso u obesidad.

El cansancio no solo afecta fisiológicamente, también puede afectar en la toma de decisiones, generar desidia por hacer ejercicio o incluso hacer que las personas aumenten el consumo de azúcares y calorías vacías para tratar de tener más energía o estar más atentos.

Tengan en cuenta que tanto la cantidad como la calidad del sueño son importantes. También identifiquen y eliminen las distracciones que afectan su sueño y hacer un plan para un mejor descanso nocturno.

El estrés es algo común en la sociedad actual. El rápido estilo de vida, las largas horas de trabajo y las presiones sociales hacen que las personas estén más ansiosas y en un estado de estrés constante. Además de tener efectos psicoemocionales y fisiológicos, el estrés aumenta la comodidad al comer, el deseo de consumir alimentos y desencadena la liberación de cortisol en el cuerpo, lo que conduce a niveles más altos de insulina y, a su vez, a un aumento de peso.

También la ansiedad y el estrés pueden impedir obtener el sueño reparador que necesitan para mantener un peso saludable. Después de la cirugía de manga gástrica Monterrey es probable que presenten altos niveles de ansiedad, sobre todo por los cambios en la alimentación que deben hacer.

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